La aprobación de la primera Ley de Servicios de Atención a la Clientela marca un punto de inflexión en la relación entre empresas y consumidores en España. La norma, que entrará en vigor en 2026, impone nuevas obligaciones en materia de tiempos de espera, accesibilidad, atención personalizada y control del spam. Sabio Group, especialista en transformación digital en Experiencia de Cliente, analiza el alcance de esta legislación y los retos que plantea para el tejido empresarial.
La relación entre empresas y consumidores en España afronta una transformación profunda tras la aprobación de la primera Ley de Servicios de Atención a la Clientela. El Congreso de los Diputados dio luz verde a esta normativa, impulsada por el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, con el objetivo de reforzar los derechos de los usuarios y garantizar una atención más accesible, eficaz y transparente en todos los canales de comunicación empresarial.
La ley, cuya entrada en vigor está prevista para 2026, introduce un marco regulatorio inédito que obligará a las compañías a revisar en profundidad sus modelos de atención al cliente. Desde la reducción de los tiempos de espera telefónica hasta la limitación del uso exclusivo de sistemas automatizados, pasando por el control de las llamadas comerciales no solicitadas, la norma supone un cambio estructural que tendrá un impacto directo en los procesos, la tecnología y los equipos humanos de las organizaciones.
Sabio Group, empresa especializada en servicios de transformación digital en Experiencia de Cliente, ha analizado el contenido de la nueva legislación y advierte de la necesidad de que las empresas comiencen cuanto antes a planificar su adaptación. Según la compañía, el incumplimiento de los nuevos requisitos podría acarrear sanciones económicas de gran magnitud, lo que convierte la adecuación a la ley en una prioridad estratégica para numerosos sectores.
Uno de los pilares fundamentales de la normativa es la mejora de la accesibilidad a los servicios de atención al cliente. El texto legal nace como respuesta a una demanda social creciente de interacciones de mayor calidad, con especial atención a las personas en situación de vulnerabilidad, como los mayores o las personas con discapacidad. En este sentido, la ley refuerza la obligación de ofrecer una atención comprensible, cercana y eficaz, independientemente del canal utilizado.
Para Sabio Group, la tecnología juega un papel clave en este proceso de adaptación. “Para lo que es fundamental que las empresas cuenten con la tecnología más avanzada, basada en inteligencia artificial, que permite a los contact center contar con las herramientas necesarias para adaptarse a las necesidades que requiere la Ley de Servicios de Atención a la Clientela”, asegura Rocío Rodríguez, Insight Sales Specialist de Sabio. La experta subraya que la combinación de innovación tecnológica y supervisión humana será determinante para cumplir con las exigencias normativas sin deteriorar la experiencia del usuario.
El refuerzo de la atención a los colectivos vulnerables no es una novedad absoluta para las empresas, pero sí adquiere ahora carácter obligatorio. Tras la pandemia de COVID-19, muchas organizaciones comenzaron a adaptar sus sistemas y procesos para atender mejor a estos grupos, una tendencia que la nueva ley consolida y eleva a rango legal, situando a las personas en el centro de la estrategia de atención al cliente.
Entre las medidas más concretas y de mayor impacto se encuentra la limitación de los tiempos de espera telefónica. La norma establece que, de media, las llamadas no podrán superar los tres minutos de espera y que, en ningún caso, la atención podrá realizarse exclusivamente a través de contestadores automáticos o sistemas de inteligencia artificial. Este requisito obligará a las empresas a reforzar sus equipos y optimizar sus flujos de atención.
En opinión de Rodríguez, “ahora, más que nunca, las compañías tendrán que estar equipadas con la mejor tecnología y contar con la confianza de sus partners no solo para filtrar las llamadas a la mayor brevedad, sino también para ayudar a los trabajadores de los contact center a conocer en tiempo real las diversas soluciones a los problemas que plantea el cliente”. La experta apunta a la necesidad de dotar a los agentes de herramientas que les permitan resolver incidencias con rapidez y precisión.

La gestión de reclamaciones es otro de los ámbitos donde la ley introduce cambios sustanciales. El nuevo marco legal reduce de 30 a 15 días el plazo máximo para ofrecer una solución a las quejas de los consumidores. Este acortamiento de los tiempos de respuesta exigirá una reorganización interna de los departamentos de atención al cliente y una mayor coordinación entre áreas.
Según Sabio Group, este nuevo escenario obliga a las organizaciones a planificar cuidadosamente tanto la redefinición de sus equipos humanos como la implantación de soluciones tecnológicas avanzadas. La compañía destaca la importancia de contar con un partner especializado en transformación digital en Experiencia de Cliente que acompañe a las empresas durante todo el proceso de transición, garantizando una adaptación ordenada y eficaz.
La ley también incorpora novedades relevantes en materia lingüística. Las empresas con más de 250 empleados y una facturación superior a 50 millones de euros que operen en territorios con lenguas cooficiales deberán ofrecer atención en euskera, catalán, valenciano o gallego, además del castellano. Este derecho se aplicará a todos los canales de comunicación y busca garantizar una atención inclusiva y respetuosa con la diversidad lingüística.
En este ámbito, la tecnología vuelve a ser un aliado clave. “En Sabio contamos con las mejores soluciones de lenguaje natural generado mediante IA generativa que cuenta con la supervisión de un equipo de expertos lingüistas que logra que la interacciones con los usuarios sean cómodas y no estén encorsetadas a unas palabras clave”, afirma Rocío Rodríguez. La combinación de inteligencia artificial y conocimiento lingüístico especializado permitirá ofrecer una atención fluida y natural en múltiples idiomas.
Otro de los aspectos más valorados por la ciudadanía y abordados por la nueva legislación es la lucha contra el spam telefónico. Durante años, las llamadas comerciales no solicitadas han generado un creciente malestar social. Para poner freno a esta práctica, la ley obliga a utilizar prefijos específicos para este tipo de comunicaciones, claramente diferenciados de los destinados a la atención al cliente, facilitando así su identificación por parte de los usuarios.
Con esta batería de medidas, la primera Ley de Servicios de Atención a la Clientela se perfila como un instrumento clave para redefinir la relación entre empresas y consumidores en España. Para Sabio Group, el reto no reside solo en cumplir la norma, sino en aprovecharla como una oportunidad para mejorar la experiencia del cliente, reforzar la confianza y avanzar hacia modelos de atención más humanos, eficientes y sostenibles en el tiempo.
